El Pregón de les Fogueres de Sant Joan del año 2024 se celebró el sábado 1 de junio de 2024 en la Plaza del Ayuntamiento de Alicante.
El evento congregó entorno a 6.000 personas en la Plaza del Ayuntamiento de Alicante. El acto del Pregón comenzó a las 21.30 horas con la bienvenida del alcalde de Alicante Luis Barcala, quien desde el balcón del Ayuntamiento procedió a presentar al pregonero de este año, artista constructor de monumentos fogueriles Sergio Gómez Ferrer.
Tras su discurso, las Belleses del Foc adulta e infantil, Alba Muñoz Navarro y Martina Lloret Rocamora pronunciaron unas palabras de agradecimiento y dieron la bienvenida a las fiestas.
El acto estuvo adornado con luces, proyecciones, música, cañones de confeti, bengalas y globos gigantes azules y blancos que se lanzaron desde los balcones del Ayuntamiento.
Como se viene haciendo de forma tradicional, previo al Pregón se celebraron una serie de actos adicionales. A las 18.00 horas tuvo lugar una mascletà patrocinada por Mahou en el parking del Auditorio Provincial ADDA, donde Pedro Luis Sirvent utilizó cerca de 100 kilos de pólvora mezcladas con las cenizas de Hogueras 2023.
Tras ello, frente al ADDA, más de mil músicos se unieron por primera vez para dar comienzo al Inici de la Festa, tocando al unísono el famoso pasodoble José Ángel Guirao, con motivo del 25 aniversario del fallecimiento de José Ángel Guirao Sánchez. Al mando se encontraba Miguel Ángel Ivorra, uno de sus compositores.
A continuación, en la Plaza de España, y delante del Monumento al Foguerer, se rindió el Homenaje a los Foguerers y Barraquers fallecidos.
El acto fue seguido por el tradicional desfile que llevó a los participantes desde la calle San Vicente hasta la Plaza del Ayuntamiento, donde el pregón oficial dio comienzo formal a las fiestas.
El pregonero fue Sergio Gómez Ferrer, un consagrado artista constructor de fogueres.
Sergio Gómez lleva sumido en el mundo de construcción de hogueras desde 1995.
Sergio Gómez pronunció un pregón marcado por su emotividad, enaltecimiento de la ciudad de Alicante y su agradecimiento a la fiesta.
Alcalde, Luis Barcala:
Alicantinas, alicantinos, ha dejado el anonimato de meses y meses de taller para pasar a un primer plano que no le gusta demasiado. Se ha emocionado, como nos ha ocurrido a todos, al escuchar el pasodoble José Ángel Guirao porque, además, tiene parentesco con este histórico y recordado foguerer. De consolidada y reconocida trayectoria profesional en el mundo de las hogueras, capaz de ilusionarnos desde que en 2007 plantara “La Naturaleza Dio a la Luz una Niña y la Llamó Primavera”, su primera hoguera oficial para los niños de Alicante. Artista y foguerer, hombre de la Festa, en apenas dos semanas veremos en esta misma plaza su undécima creación, “Llum d'Alacant”.
Les hablo, lo conocéis bien, de Sergio Gómez Ferrer, pregonero de las Hogueras 2024.
Sergio Gómez Ferrer:
El Alicante de mi vida, la terreta de mi pasión, hoy despierta el pensamiento de este artista, su inspiración, para esbozar con palabras de aliento la ilusión de este momento. Alicante cuánto te quiero, lo dice orgulloso mi corazón y tiene que ser lo primero, dar las gracias por el pregón. Gracias, alicantinos y alicantinas, foguerers y barraquers. Gracias a nuestro Ayuntamiento y a la fiesta oficial porque es un orgullo para este humilde artista venir a esta plaza tan importante para mí para anunciar a los cuatro vientos que les Fogueres ya están aquí. Es como soñar despierto porque, como dice la canción, “Alicante, sueño contigo. ¿Qué me has dado?”. Pues me lo has dado todo porque tienes todo lo necesario para nunca despertar.
Alicante es familia, tradición, cultura y devoción. Gastronomía, mar, castillos, museos, Tabarca, Luceros, salitre y arroz. Playas, Rico Pérez, Santa Faz, explanada, Moros y Cristianos y el soparet. Semana Santa, nanos y gegants, teatro, literatura, la coca amb tonyina, los mercados y el port. Comercio, bacores, llibrets, teselas, palmeras, Alí y Cántara, la dolçaina, el tabalet y mis amics de Foc. El Benacantil, mi Virgen de la Esperanza, la Concha, las setas y el Belén monumental. L'almorsaret, la charanga, el sol, el pasacalles, la patrona, el patrón y el Hércules campeón. El helado, los conciertos, el salado, la manta al coll y el cabaset, mo n'anirem al Postiguet. ¿Cómo no te voy a querer? Por todo esto y mucho más, claro que es Alicante una ciudad para soñar.
Ni en mis mejores sueños hubiera imaginado que alguna vez podría ser el pregonero de mis queridas fogueres. Por eso, alcalde de Alicante y amigo Luis Barcala, mi eterno agradecimiento por este regalo, pues nunca olvidaré que pude anunciar que comenzaba la fiesta oficial de mi ciudad. Traslado este sincero agradecimiento a la concejala de fiestas y a la totalidad de nuestro ayuntamiento, a quienes les pido que sigan apoyando a las fogueres como seña de identidad de un pueblo que abre sus brazos a propios y extraños. Cada mes de junio la Federació de Fogueres y todos los que la integran se esfuerzan para que la terreta se convierta en esa explosión de arte, color, música y diversión. Así son les fogueres, la celebración multitudinaria que festejamos en honor a San Juan. Y es de agradecer que sigan existiendo personas que desinteresadamente forman parte de este colectivo festero porque sois el alma y la esencia. Vosotros y vosotras, foguerers y barraquers, sois los que dais sentido a nuestros proyectos, a los que os cuesta el tiempo y el dinero. Vosotros sois los que merecéis cada año el sincero homenaje por vuestro alicantinismo, porque sin gent de fogueres no podría existir la Foguera.
Por cierto, siempre familia y siempre foguera. Gracias por ser foguerers y por ser barraquers, por representar la fiesta, por crearla y por avivar siempre la llama que enciende el corazón de la ciudad. Les Fogueres de San Joan, la festa gran d'Alacant.
Al frente de la fiesta, los miembros de la federación, quienes trabajan incansablemente para que todo esté a punto. Son fieles protectores de lo más bonito, la imagen más bella, que tiene nombre propio: Alba y Martina, nuestras bellesas del Foc y Damas de Honor. Ellas que llevan el traje airoso, fino y garboso con majestad, ellas que tienen del aire y las flores tantos rubores que hacen soñar. Qué bien lo escribió Moisés Daviá pensando en vosotras y en todas las bellezas y damas de las comisiones. ¡Alicantina de ilusión primera, llevar un traje para estar la más bella! Porque el vestido de la novia es de flores y de mar. ¡Novia alicantina, qué guapa estás!
Ojalá pudierais ver a través de mis ojos este momento desde esta posición privilegiada, desde este balcón que ha sido el mejor testigo de la evolución de las fogueres. Esa sensación de felicidad es la misma que está sintiendo nuestro presidente, David Olivares. Amigo mío, como tú bien dices, nunca dejes de soñar porque vuestros sueños nos dan vida a los artistas para seguir creando. Y tenemos que seguir trabajando unidos porque vosotros sois la fuente de la inspiración para que los artistas se expresen a través de sus obras, una simbiosis perfecta: quien motiva y quien la crea. Ese es el buen camino, porque hemos pasado tiempos difíciles sin fiestas y, a pesar de todo, me siento orgulloso de mis compañeros, los artistas alicantinos, porque todos siguen en activo. Ni una pandemia ni los malos momentos han cerrado nuestros talleres. Todos continúan creando ilusiones del arte efímero. Por eso, amigo y compañero Joaquín Rubio, maestro mayor del gremio, traslada el orgullo de este artista y pregonero por todos sus compañeros y la fuerza que supieron demostrar. Y lo seguiremos haciendo, como bien dice nuestro himno:
Una idea original empieza a deslumbrarme la nit de la cremà.
El boceto que soñé inicia sus andanzas pintado en un papel.
Las llamas con su calor encienden en la noche destellos de color.
Las figuras al arder alumbran en mis ojos de nuevo la ilusión
de volver a ver mis sueños convertidos en sueños de cartón.
Esa es nuestra historia, la que se ha escrito con capítulos donde existía una excelente relación entre grandes artistas y foguerers de renombre que han marcado épocas doradas en les fogueres. Arrancaron con José María Py y Gastón Castelló, les siguieron Don Tomás Valcárcel con Ramón Marco, sin olvidarnos de José Ángel Guirao y Pedro Soriano, y muchos ejemplos que han forjado nuestro pasado y presente. Pero quién sabe si el futuro está en esta plaza, porque estoy seguro que entre vosotros habrá un próximo artista y un gran foguerer. Hombres o mujeres que tendrán en sus manos el devenir de la fiesta con la pasión que nos caracteriza, asegurando la continuidad y recordando con respeto y admiración nuestro pasado, hacia dónde vamos y de dónde venimos.
En estos últimos días, mientras comenzaba a trazar líneas para nuevos bocetos, me venían a la mente los recuerdos y el origen de mi relación con la fiesta. Me siento muy privilegiado de mis raíces. Vivo rodeado de foguerers de los de antaño, de esos que llamamos los de toda la vida, los que venden su lotería, mueven y cargan vallas, se quedan hasta el amanecer con su plantà. En definitiva, foguerers de pureza y tiene un porqué: En mi casa mis padres nos supieron inculcar el sentimiento por las tradiciones. Somos una familia de foguerers, herculanos y peregrinos, como los buenos alicantinos. Soy hijo de una alicantina y un madrileño que vino a trabajar de cocinero y pudo saborear el encanto de esta ciudad. Se enamoró de una preciosa belleza que lo fue en la Plaza de Gabriel Miró y conquistó su corazón hasta convertirlo en barraquer y en gran apasionado de lo nuestro, como buen alicantino de adopción.
En mi casa nunca ha faltado un traje de foguerer o saragüell, ni de huertana o alicantina. Siempre los teníamos preparados, cuidando con esmero hasta el más pequeño de los detalles. Un hogar donde siempre respiramos aires de fiesta, y eso es gracias a mis padres. Y yo he intentado hacer lo mismo que ellos con mis hijos. Me encanta cuando mi hijo dibuja bocetos o hace maquetas o incluso me presta sus rotuladores para pintar mano a mano en la misma mesa, o cuando mi hija me dice que quiere ser el banderín de la foguera, la que nació en una tarde de plantà y no se ha perdido ni una sola a pesar de su corta edad. Lo que daría porque mi padre los pudiera ver, estaría tan contento.
Ha sido tan fácil diseñar el boceto de la foguera de mi vida… Mi familia, la que me enseñó durante la infancia y que me ha regalado la fiesta con la que disfruto cada día. Por eso tenemos que agradecer eternamente a nuestros mayores porque nos enseñaron a querer, respetar y comprometernos con nuestras costumbres. Un legado que debemos continuar en el tiempo para que sigan naciendo las pasiones por todo lo bueno que tiene la Terreta.
Hoy quisiera diseñar con palabras un boceto dedicado a todos vosotros, las alicantinas y los alicantinos, las personas de las que aprendo y respeto. Se trata de una foguera que nace del alma con los mismos sentimientos que uno de vosotros, pintada con colores mediterráneos con sabor a la mar mansa y lluentosa, a la que abanica les palmeres y a la llum de les fogueres, con los consejos del maestro y amigo Pascual Domínguez para poder plantar con la experiencia de su veteranía y modelaré la figura de una belleza con su vestido de novia alicantina. Será mi ninot indultat y estará en el corazón de la foguera, porque el mío ya lo tiene conquistado, mi alicantina de ojos de fuego, mi querida esposa, mi foguerera.
En las cartelas, los versos escritos del anhelado y hoy homenajeado José Ángel Guirao, el paladín de las hogueras y una estrella en las estrellas. De él recordaremos frases que nos hacían palpitar, de la Florida a Santa Creu, de les Carolines al Passeig, del Àngels fins al Baber. La ciutad es converteix tota plena de saragüells, esos saragüells de los que siempre hacía gala para lucir con porte los estandartes de les fogueres. Banderines que marcáis el camino, los que anunciáis la llegada de las comisiones, vosotros sois el emblema de la fiesta. Quisiera ver cómo los levantáis, que se alcen les flames cami del cel, que se note que estáis aquí, banderines de las hogueras y las barracas, ¡al cel!.
Y vamos llegando al final. Se acercan los días que tanto esperamos y los que queremos vivir, los días grandes para revivir de lo bueno lo mejor. Y son muchas las cosas que tenemos que hacer. Tenemos que disfrutar, plantar, sentir, reír y triunfar, gestionar, organizar, cobrar y pagar, vestir, ataviar, aplaudir, desfilar y ofrendar, convivir, recibir, atender, comer, bailar y soñar, vibrar, quemar, recordar, llorar y resurgir. Y yo, en este caso y en este momento, pregonar. Y lo quiero hacer con todas las personas de la fiesta, por los que fueron, por los que somos y por los que serán.
Para finalizar, os voy a pedir un favor. La foguera que plantaré en esta plaza en pocos días tiene por lema “Llum d'Alacant”, la luz de nuestra tierra. Esa que brilla de forma especial cada mes de junio, la que esclarece el cielo ante los Luceros con el estruendo de las mascletás, la que alumbra las noches y las convierte en día, la que irradia esplendor cada Nit de Sant Joan. Vosotros sois la luz de la Terreta, porque sois los artífices del éxito de una ciudad que se transforma para ser la capital del fuego. Por ello, y para homenajear a quienes ya no están con nosotros, todos juntos encenderemos la chispa de las fogueres. Esas bengalas que os han repartido serán los destellos que nos harán recordar a los que estuvieron y servirán como señal para que, allá donde estén, sepan que seguimos cumpliendo con lo que ellos empezaron. Entonaremos juntos la cuenta atrás para dar la bienvenida a la fiesta. Con cariño, os pide este pregonero encender la chispa de la felicidad y anunciemos al mundo entero ¡que les fogueres toman la ciudad!.
Por favor, conmigo: 10, 9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1…
Gracias, gracias y seis mil veces gracias. El regalo me lo habéis hecho vosotros a mí. ¡Bones Fogueres per a tots!